miércoles, 16 de diciembre de 2009
Desaparece el terrorista de Lockerbie
Desaparece el terrorista de Lockerbie
Las autoridades escocesas encargadas de comprobar que se cumplen las condiciones de su liberación no han podido contactarlo
Por Agencia EFE
LONDRES - El libio Abdul Baset Ali al-Megrahi, condenado por el atentado terrorista de Lockerbie y puesto en libertad el pasado agosto por razones humanitarias por el Gobierno escocés, no ha podido ser contactado en su residencia de Trípoli o en el hospital.
Así lo informa hoy el diario británico The Times, según el cual los funcionarios libios no han dicho nada de su actual paradero y las autoridades escocesas encargadas de comprobar que se cumplen las condiciones de su liberación no han podido ponerse en contacto con él por teléfono.
Algunos políticos a ambos lados del Atlántico, así como los familiares de las 270 personas, en su mayoría estadounidenses, que murieron en el atentado de 1988 contra un avión de Pan Am que sobrevolaba Escocia, se muestran indignados por la desaparición del libio, que sufre un cáncer de próstata en fase terminal.
El portavoz para temas de justicia del Parlamento de Edimburgo dijo que la reputación de Escocia está en peligro y lo ocurrido demuestra lo ridículo que resulta responsabilizar a un municipio escocés a miles de kilómetros de distancia de Libia de supervisar al terrorista.
El congresista estadounidense Eliot Engel, citado por The Times, calificó de "tremenda equivocación" haberle concedido la libertad: "No creo que un terrorista convicto vaya a tener la integridad moral suficiente para cumplir el acuerdo que sea".
El corresponsal de The Times fue el domingo a la casa de Al Megrahi, pero se encontró a un policía que no hablaba inglés, pero que indicó que el hombre al que buscaba no estaba allí.
Al día siguiente, el periodista visitó el Centro Médico de Trípoli, donde aquél fue tratado del cáncer terminal que sufre tras su regreso al país, pero los recepcionistas le informaron de que había sido dado de alta hacía algún tiempo.
Jonathan Hinds, del Ayuntamiento de la localidad escocesa de East Renfrewshire, encargado de supervisar desde lejos al terrorista, tampoco ha podido hablar con él, como ha venido haciendo regularmente desde agosto.
"Seguiremos intentándolo, y si existe la sospecha de que Al Megrahi ha violado las condiciones de su liberación, lo comunicaremos al Gobierno escocés, que tendrá que decidir qué medidas adoptar", dijo Hinds.
Los médicos libios han enviado regularmente al Gobierno escocés informes sobre la evolución de la enfermedad del libio.
El terrorista no ha sido visto en público desde el pasado 9 de septiembre cuando le visitó en el hospital una delegación de políticos africanos.
Estaba en silla de ruedas, no dijo nada y tosió repetidamente, según quienes le observaron.
Su hermano mayor, Mohammed, dijo a The Times que al Megrahi está siendo examinado por especialistas italianos en cáncer y que está recibiendo su cuarta dosis de quimioterapia. Pidió por eso que se le dejara en paz.
El abogado escocés de Al Megrahi, Tony Kelly, no quiso comentar el caso, y la Embajada británica en Trípoli tampoco ha querido pronunciarse.
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