Famosos en bancarrota
Conoce a algunas de las figuras de la farándula local e internacional que se han acogido a la ley de quiebra
Ayer se dio a conocer que Silverio Pérez se acogió a la Ley de Quiebras, así como en el pasado lo hicieron Olga Tañón, Héctor Delgado y Magaly Febles. (Archivo)
Por Servicios combinados
La crisis económica continúa afectando a todos y los famosos no están exentos de ella. Mientras algunos hacen ajustes en su estilo de vida, hay otros que terminan declarándose en quiebra porque su nivel de gastos supera sus ingresos.
Ayer trascendió que el cantautor y comediante Silverio Pérez se acogió a la protección de la Ley de Quiebras al reportar deudas que superan el millón de dólares.
Según el informe más reciente del Boletín de Puerto Rico, las obligaciones de Pérez totalizan $,1,076,818. Su principal acreedor es First Mortgage, entidad a la que adeuda $549,862. El también columnista además adeuda $290,038 a Oriental Bank, y $189,856 a FirstBank. Los activos reportados ascienden a $542,500, e incluye propiedades, certificados de depósito, libros, joyas, guitarras y amplificadores.
A continuación, algunos famosos del patio que se han declarado en bancarrota:
Héctor Delgado - En diciembre de 2008, el reguetonero hasta entonces conocido como "El Father" se fue a la quiebra porque sus ingresos mermaron significativamente luego de que se convirtiera a la fe cristiana.
“Estamos reajustando mi vida... Eso es todo. Para la gente hoy Héctor Delgado se fue en quiebra; para la gente hoy se cayó un imperio; para la gente hoy Héctor Delgado está enterrado, pero para Dios yo acabo de sellar mi nombre en el libro de la vida”, dijo en aquel momento.
Contó que su manejador, Andy Martínez, le recomendó que se acogiera al Capítulo 13 de la Ley de quiebras, para honrar los compromisos con sus acreedores mediante un plan de pago. Los gastos del artista, que en el mundo secular fue conocido como “El Father”, ascendían a $30 mil mensuales, en un momento en que ya no percibía los cientos de miles de dólares que recibía por sus presentaciones.
Olga Tañón - En mayo pasado se dio a conocer que la reconocida merenguera y empresaria y su esposo William Denizard se acogieron a la Ley de quiebras tras adeudarle $7.2 millones a una treintena de acreedores.
En la petición de quiebras, radicada el 30 de diciembre de 2010 en el Tribunal de Quiebras de Florida, la mujer de fuego y su pareja indican que sus activos apenas suman $3.3 millones. En esa lista aparecen 11 propiedades, cuyo valor total asciende a $3.9 millones.
Entre los acreedores figuran el Banco Popular con $2.3 millones y $350,000 al Servicio de Rentas Internas Federal.
Magali Febles Moreta - En octubre de 2009, la estilista se acogió al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras, con deudas que sumaban $1,390,876.33.
Las mismas se desglosaron en $1,078,501.23 en deudas aseguradas, $161,748.58 en préstamos personales y $150,626.52 en deudas al gobierno.
Entre los acreedores en la extensa lista, se encontraba el productor Eric Delgado a quien Magali Febles le debía $10 mil. La mitad era por trabajos de grabaciones y ediciones que se realizaron para los certámenes de Miss Puerto Rico Universe desde el 2004 y un préstamo de $5 mil que le hiciera para la renta de una unidad móvil.
Casos populares:
En el panorama internacional, José José se vio en aprietos económicos en 2008, cuando su esposa, Sara Salazar, fue hospitalizada, tras sufrir un derrame cerebral en Acapulco.
Se dijo que la deuda del intérprete, a raíz de la hospitalización alcanzaba los 100 mil dólares. Con el apoyo del algunos famosos como Cristian Castro y Ana Bárbara, entre otros, que organizaron el concierto 'Entre Amigos', el cantante pudo hacer frente a sus deudas económicas.
Por otro lado, el intérprete de "El triste" y "Lo pasado, pasado" lo único que pedía a los empresarios era que le dieran trabajo para salir de su "precaria situación económica".
José José, finalmente, pudo pagar su deuda con el hospital que atendió a su esposa, gracias a donativos del medio artístico y su esposa se recuperó totalmente en Miami.
- Tony Braxton, quien en la década de los 90 tomó gran popularidad por el éxito "Unbreak My Heart", actualmente, tiene varias deudas millonarias.
- Un cantante más que despegó en los 90 fue MC Hammer con "U Can't Touch This", pero tampoco supo administrar los millones de dólares que ganó con este hit. Se declaró en bancarrota en 1996.
- La ganadora de un Oscar, Kim Basinger, también ha sufrido las penumbras de verse en quiebra, y es que luego de perder una demanda interpuesta por los productores de la cinta Boxing Helena, tuvo que pagar 8 millones de dólares y vender la casa donde vivía para recuperarse un poco. La demanda fue porque se negó a trabajar en dicha cinta, ya que no le gustaban las escenas sexuales que contenía; sin embargo, ya había firmado el contrato.
- Por otro lado, las extravagancias y los juicios multimillonarios le hicieron a Michael Jackson vivir rodeado de deudas a pesar de generar una gran cantidad de dinero con sus ventas, sus catálogos musicales (en el que se incluyen las canciones de los Beatles) o sus conciertos. Derrochaba en caprichos y regalos, su rancho "Neverland" estuvo a punto de ser subastado públicamente y The Wall Street Journal cifró sus deudas en 500 millones de dólares, pero tras su muerte se ha convertido de nuevo en un negocio perfecto. En esta liga puedes escuchar su éxito You are not alone.
- Un caso más triste de decadencia personal y monetaria lo protagonizó Whitney Houston, que tuvo que llegar a subastar objetos personales y de sus conciertos, a pesar de ser la "artista más premiada de todos los tiempos", debido a sus problemas con las drogas, aunque actualmente está superando su crisis.
- Una estrella más que perdió todo después de darse una vida de lujo, es el actor de la cinta "Un ángel enamorado", Nicolas Cage, quien últimamente se encuentra encabezando diferentes tabloides, pero por su situación financiera más que por su trabajo. Luego de que hiciera ganancias impresionantes que fueron mal administradas en yates, coches, casas y muchos objetos de lujo, el actor sigue negando que haya perdido todo lo que una vez ganó.
