ROMA (Reuters) - El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, sufrió una gran humillación el martes en una votación parlamentaria que mostró que ya no tiene mayoría mientras aumenta la presión para que dimita.
El Gobierno de Berlusconi ganó una votación clave porque la oposición se abstuvo, pero solamente consiguió 308 votos, menos de los 316 necesarios para una mayoría absoluta en la cámara de 630 miembros.
El líder de la oposición, Pier Luigi Bersani, pidió la dimisión inmediata de Berlusconi, diciendo que Italia corre un riesgo real de perder el acceso a los mercados financieros después de que los rendimientos de los bonos del Gobierno se acercaran a la línea roja del 7 por ciento.
"Le pido a usted, señor primer ministro, con toda mi fuerza, que por fin sea consciente de la situación (...) y dimita", indicó Bersani justo después de la votación.
El ministro de Defensa, Ignazio La Russa, dijo que Berlusconi consultaría con el jefe de Estado Giorgio Napolitano, sobre su próximo movimiento. Napolitano estaría a cargo de la crisis si Berlusconi dimitiera.
La Russa dijo que todas las opciones están abiertas después de la votación, y que el Gobierno decidirá su siguiente paso en las próximas horas.
Berlusconi lleva semanas contra las cuerdas, pero los sucesos del martes parecen haberle empujado a la dimisión inevitable.
Antes, el aliado de coalición de Berlusconi Umberto Bossi, líder de la Liga Norte, le pidió que dimitiera, y el magnate de los medios, de 75 años, ha recibido una serie de golpes que podrían resultar letales.
Bossi dijo que Berlusconi debería ser reemplazado por Angelino Alfano, secretario del partido PDL del primer ministro.
"Hemos pedido al primer ministro que abandone el cargo", dijo Bossi a periodistas frente al Parlamento.
Berlusconi se ha mostrado hasta ahora desafiante antes de una votación parlamentaria del martes por la tarde sobre finanzas públicas, rechazando llamamientos procedentes de todos lados para que dimita y tratando de recuperar el apoyo de un gran número de rebeldes del PDL. La votación demostró que no ha podido evitar una importante rebelión.
LA VOTACIÓN PODRÍA INCLINAR LA BALANZA
La declaración de Bossi y la votación en el Parlamento podrían inclinar la balanza en su contra mientras saltan las alarmas en los mercados de bonos sobre la inestabilidad de Italia.
Se cree que la Liga, junto con muchos miembros del PDL, quiere que Berlusconi deje sitio a un nuevo gobierno de centroderecha capaz de afrontar una enorme crisis económica y restablecer la confianza de los mercados sin entregar el poder a una administración de transición.
Poco antes, cinco rebeldes del PDL dijeron que no participarían en la votación sobre la financiación pública el martes por la tarde recortando apoyos al líder italiano.
La oposición de centroizquierda dijo haberse abstenido para exponer la debilidad de apoyos a Berlusconi mientras a la vez permite la aprobación de una medida vital para las finanzas estatales.
Mientras la caída de Berlusconi se ha convertido en lo que los comentaristas han descrito como una "larga agonía", los tipos de interés sobre la deuda italiana se han disparado a niveles que han causado una profunda preocupación sobre la supervivencia de la eurozona si la tercera economía más grande del grupo no puede pagar sus deudas.
El rendimiento de los bonos italianos de referencia a 10 años subió el martes al 6,74 por ciento antes de volver a bajar. Los analistas señalan que Italia está llegando al punto en el que Portugal, Grecia e Irlanda se vieron obligadas a pedir un rescate.
El primer ministro finlandés, Jyrki Katainen, ha dicho que Italia es demasiado grande para un rescate.
"Es difícil ver que nosotros en Europa tuviéramos recursos para poner un país del tamaño de Italia en el programa de rescate", dijo al Parlamento en Helsinki.
Con el diferencial entre los bonos italianos y alemanes -reflejo del riesgo extra de comprar bonos italianos- acercándose a los cinco puntos porcentuales, la líder de la patronal italiana, Emma Marcegaglia, dijo: "No podemos seguir así mucho tiempo".
Los analistas estiman que los tipos actuales de interés, si se mantienen durante mucho tiempo, cancelarían los ahorros presupuestarios previstos en un doloroso paquete de austeridad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario