jueves, 16 de septiembre de 2010

El Papa advierte contra el ateismo en su visita a Reino Unido



El Papa advierte contra el ateísmo en su visita a Reino Unido

El Papa Benedicto XVI comenzó el jueves un viaje a Reino Unido pidiendo al país que proteja sus raíces cristianas y tradición de tolerancia frente a las amenazas de un secularismo agresivo y ateísmo extremo.

El Papa reconoce falta de vigilancia en los casos de abusos

Más de 100.000 personas, incluidos protestantes, se congregaron para ver al Pontífice, de 83 años, mientras era conducido por las calles de la capital escocesa llevando una bufanda a cuadros verde.
Benedicto XVI tiene un delicado camino por recorrer en Inglaterra y Escocia en las relaciones con la Iglesia anglicana, después de su oferta en octubre pasado de facilitar la conversión de anglicanos descontentos por la ordenación de mujeres y obispos homosexuales.
Después de ser saludado por la reina Isabel - principal responsable de la Iglesia de Inglaterra fundada cuando Enrique VIII rompió con Roma en 1534 - el Papa fue al corazón de su mensaje en su primer discurso en tierras británicas como líder de la iglesia Católica Romana.
Habló de las "profundas raíces cristianas que aún están presentes en todos los ámbitos de la vida británica".
Grupos que planean protestas contra el viaje del Papa, el segundo en la historia, incluían ateos, organizaciones laicas y aquellos que quieren que el Pontífice sea considerado legalmente responsable por los escándalos de abusos sexuales de la iglesia Católica.
En una conversación con los periodistas en el avión que lo llevaba a Escocia, Benedicto XVI admitió que los líderes católicos no habían sido lo "suficientemente vigilantes" durante las décadas que duraron los abusos sexuales a niños.
El Papa, decidido a ganarse a uno de los países más seculares de Europa, recordó a los británicos que estén alerta ante el extremismo, diciendo que los intentos de los regímenes totalitarios en el siglo XX para eliminar a Dios debería ser aleccionadores para la tolerancia.
"En la actualidad, el Reino Unido se esfuerza por ser una sociedad moderna y multicultural. Que en esta exigente empresa mantenga siempre su respeto por esos valores tradicionales y expresiones culturales que formas más agresivas ya no aprecian o siquiera toleran", dijo.
"Que esto no debilite la raíz cristiana que sustenta sus libertades", señaló.
EL PAPA Y LA REINA
El Pontífice alemán habló con entusiasmo de la historia del Reino Unido y especialmente elogió al pueblo británico por su resistencia a la "tiranía Nazi" en la Segunda Guerra Mundial.
La reina de Inglaterra también habló de la común herencia cristiana que comparten los anglicanos y los católicos, así como de su creencia común de que nunca debería permitirse que la religión justifique la violencia, y de que el diálogo puede transcender "viejos recelos".
La policía dijo que unas 125.000 personas se alinearon en las calles para vitorear al Papa. Unos 150 manifestantes también se reunieron para protestar, haciendo ondear las banderas arco iris de los homosexuales y pancartas que decían "La oposición del Papa a los condones mata a la gente" y "Dejad de proteger a los sacerdotes pedófilos".
Benedicto dijo a los periodistas que no era la misión de la iglesia Católica cambiar con los tiempos "para intentar ser más atractiva", sino declarar lo que creía que eran verdades fundamentales.

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